¿Qué es el cultivo de microorganismos?

Las especies diminutas son elementos fundamentales de los ecosistemas, su labor es indispensable para diversos procesos biológicos, como la degradación, pero también desempeñan un papel clave en el cuerpo humano, pues conforman la microbiota, es decir, las bacterias, hongos y levaduras que establecen relaciones simbióticas. Las personas han aprendido a aprovechar las reacciones que desempeñan naturalmente los entes minúsculos para aplicarlas en la fabricación de productos, como yogur, vino, medicamentos y panes, sin embargo, no cualquier ejemplar sirve, hay que comprender su función para reconocer en qué es utilizable o si se debe tener en cuenta como contaminante o agente infeccioso. 

Este contenido está dedicado a la práctica en la que se incentiva el desarrollo de los microbios, pero antes de pasar a ello, te recordamos que puedes visitar los catálogos de COPISA para encontrar material de laboratorio farmacéutico o equipo para centros de investigación. 

Crear ambientes ideales para los microbiontes

Uno de los pasos a los que se recurre frecuentemente para el estudio de los microorganismos es el cultivo, este consiste en brindarles entornos propicios para su proliferación, estos espacios suelen ser medios nutritivos sólidos o líquidos. 

Esta actividad requiere proporcionar los nutrientes ideales y accesibles desde una perspectiva metabólica para que los organismos microscópicos se multipliquen. Al aumentar la cantidad de agentes es más fácil identificarlos, efectuar pruebas de sensibilidad, evaluar las características, comportamiento y realizar experimentos. Las aplicaciones de la replicación de especies minúsculas son múltiples, por ejemplo: 

• Investigación científica. 

• Diagnósticos médicos y tratamientos de padecimientos. 

• Generación de artículos relacionados con la biotecnología. 

• Elaboración de alimentos y bebidas. 

• Creación de medicamentos e insumos farmacéuticos. 

• Control de calidad. 

El procedimiento y sus requerimientos se modifican con base en el tipo de microbio que se desea reproducir, mas es posible mencionar algunas formas de cultivo de microorganismos que se practican comúnmente:

• Puro. Se recurre a un solo tipo de ejemplar para multiplicarlo y lograr una población libre de otros microbiontes. 

• Mixto. Se favorece la replicación de diversos organismos, es útil para observar su interacción y si dan lugar a simbiosis o a competencia. 

• En serie o escalonado. El cultivo se traslada secuencialmente a nuevos medios para mantener e incrementar la población. Es factible para obtener grandes cantidades de agentes. 

• En escala. El entorno se ocasiona en grandes volúmenes, como biorreactores. Es típico para fabricar mercancías en la industria. 

• En anaerobiosis. Es el destinado a los entes que no ocupan oxígeno, por lo que las condiciones anaeróbicas son controladas. 

• En condiciones extremas. Algunos especímenes pueden mantenerse en contextos con factores extremos (como temperaturas elevadas), por lo que estas cualidades se simulan. 

Cómo multiplicar especies microscópicas

Cabe remarcar que, en determinados casos, esta práctica debe realizarse por profesionales o quienes cuenten con los saberes para cumplir las normas de seguridad. A grandes rasgos, las fases para la proliferación de microbios son:

1. Preparar el medio de cultivo. Típicamente es un gel o solución que se dispone en una placa de Petri. 

2. Esterilizar. Asegurarse de que el entorno esté libre de sustancias u organismos distintos a los solicitados para el proceso. 

3. Inoculación. Colocar al o los microbiontes en el medio a través de una herramienta adecuada, como una pipeta. 

4. Incubación. Dejar la muestra en el ambiente oportuno, como una incubadora o sala para tal fin. 

5. Vigilancia y control. Dar seguimiento a las etapas que atraviesan los especímenes mediante observación u otras técnicas, como la medición de biomasa o el recuento de células. 

6. Mantenimiento y transferencias. De ser necesario, prolongar la actividad de los agentes a través de nuevos entornos, otorgándoles nutrientes. 

También puedes consultar el contenido acerca de los métodos de cuantificación de microorganismos.

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La precisión y el éxito de los procedimientos se relacionan ampliamente con la calidad de los recursos, los cuales deben ser elaborados con materiales adecuados y mediante prácticas de fabricación correctas. Para adquirir los insumos que favorezcan a tus proyectos, visita los catálogos de equipos y soluciones que COPISA te ofrece.

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Fuentes consultadas.

1. https://www.fundacionaquae.org/la-simbiosis-animales-cuerpo-humano/

2. https://www.msdmanuals.com/es-mx/professional/enfermedades-infecciosas/diagn%C3%B3stico-de-laboratorio-de-las-enfermedades-infecciosas/cultivo

3. https://accessmedicina.mhmedical.com/Content.aspx?bookid=1837&sectionid=128956048