Gases arteriales: qué son y cuál es su aplicación

Los descubrimientos aplicados a las áreas clínica y médica han avanzado rápidamente en los últimos años, los estudios practicados en seres vivos son de una amplia ayuda para detectar a tiempo enfermedades y atenderlas, los resultados se pueden observar en el aumento de la esperanza y la calidad de vida. Por otra parte, las indagaciones son la base de la industria, estas favorecen el desarrollo de nuevos productos que satisfagan a los usuarios, así mismo, son ideales para mejorar las prácticas. 

En los siguientes párrafos se abordará la prueba de sangre que facilita información a través de los componentes gaseosos, pero antes de pasar a ello, es importante recordar que para adquirir el material adecuado para centros de investigación y laboratorios universitarios puedes visitar los catálogos de COPISA.

Gasometría arterial en el diagnóstico de los organismos e industrias

Se recurre a esta técnica para evaluar los niveles de dióxido de carbono, oxígeno y otros componentes de uno de los fluidos más importantes del cuerpo humano, es por ello que representa una valiosa herramienta en la elaboración de valoraciones y el abordaje de padecimientos (como los respiratorios, metabólicos y cardiovasculares). 

La obtención de las muestras se da, habitualmente, mediante la extracción del líquido de la arteria radial en la muñeca, la femoral en la ingle o la braquial en el brazo. El material es procesado para exponer los parámetros mencionados y la presión parcial de oxígeno, del dióxido de carbono, la saturación y el bicarbonato. 

Cabe resaltar que entre las afecciones en las que el estudio clínico de los gases en las   arterias es un aliado se encuentran: asma, insuficiencia y síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

Esta forma de evaluación de los organismos es útil en el sector químico como instrumento para el control de procesos, pues aporta datos sobre el equilibrio-base, las funciones respiratorias y el intercambio. Su empleo cobra relevancia en determinados escenarios, por ejemplo: 

• Exposiciones a materia peligrosa en estado gaseoso. Es habitual retomarlo cuando se sospecha que la persona estuvo en presencia de tóxicos (como el monóxido de carbono, el cianuro de hidrógeno o el dióxido de azufre). Algunos indicadores de la sangre arterial facilitan detectar la presencia de hipoxia o acidosis metabólica.

• Labores en entornos que albergan elementos capaces de alterar las funciones pulmonares. Facilita observar las consecuencias al ubicarse entre sustancias químicas, por lo tanto, es ideal para monitorear el estado de salud.  

En consecuencia, este tipo de análisis es ampliamente sugerido en ambientes en los que se sospecha u opera directamente con materia tóxica, puntualmente gaseosa, debido a que su implementación arroja información sobre los efectos en el organismo. 

Finalmente, algunas aplicaciones específicas de la gasometría arterial son el seguimiento de la calidad del aire en ambientes laborales y la vigilancia de quienes operan en ambientes extremos. Es indispensable contemplar que debe realizarse por profesionales y su uso varía de acuerdo con las regulaciones, los riesgos y la industria. 

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La precisión y el éxito de los procedimientos se relacionan ampliamente con la calidad de los recursos, los cuales deben ser elaborados con materiales adecuados y mediante prácticas de fabricación correctas. Para adquirir los insumos que favorezcan a tus proyectos, visita los catálogos de equipos y soluciones que COPISA te ofrece. 

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Fuentes consultadas.

1. https://www.cigna.com/es-us/knowledge-center/hw/pruebas-mdicas/gasometra-arterial-hw2343

2. https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003855.htm